Sobre la exposición
La serie de retratos en la exposición de fotografía “La mano de una hermana”, “presenta nueve conexiones entre las mujeres de la Fundación con víctimas del Terrorismo de la Agencia Judía y las mujeres a las que atendieron durante la guerra.
Estas conexiones nacieron del lugar más oscuro y doloroso, con el ataque sorpresa de la organización terrorista Hamas el siete de octubre.
Entre las historias que encontrarán en la exposición descubrirán mujeres que perdieron a sus seres queridos, junto a mujeres que se alistaron para ayudar por el bienestar de la comunidad afectada letalmente por la guerra.
Ninguna de ellas invitó el dolor a su vida y no podrían haber imaginado el tortuoso trayecto que las esperaba desde el momento en que las balas asesinas pusieron fin a todo; pero de la oscuridad también surgió la luz, la luz de las mujeres de la Fundación para Víctimas del Terrorismo. No tiene el poder de ahuyentar a la tediosa penumbra, pero ofrece consuelo y apoyo en los momentos más difíciles -y como podrán ver, en algunos de los casos incluso se convierte en una valiente amistad.
El fondo para las Víctimas del Terrorismo
La Fundación para las Víctimas del Terrorismo, base de la Agencia Judía, ha estado trabajando durante más de dos décadas en nombre de los ciudadanos víctimas del terrorismo en Israel, y acompaña a quienes han perdido sus hogares, sufrido heridas en el cuerpo y daño mental y perdido a sus seres queridos en actos terroristas. El personal de la Fundación acompaña a las víctimas con sensibilidad y dedicación incluso antes del reconocimiento de los organismos oficiales, y durante los años siguientes.
Desde el siete de octubre, todo se ha tornado mucho más complicado.
En los veinte años transcurridos desde que se estableció la Fundación para las Víctimas del Terrorismo, sus empleados han acompañado a unos nueve mil hogares. Actualmente, la Agencia Judía, a través de la Fundación, ayuda a los afectados desde el siete de octubre. En pocos meses, la actividad de la Fundación para las Víctimas del Terrorismo se duplicó. Tras el ataque sorpresa de Hamás y la guerra "Espadas de Hierro", unas 8000 familias se sumaron al círculo de apoyo de la Fundación. Las mujeres de la Fundación para las Víctimas del Terrorismo trabajan con diligencia para localizar a las muchas víctimas y otorgarles asistencia inicial y acompañamiento continuo.
La cantidad de las personas damnificadas hizo que la tarea fuera particularmente compleja, pero su dedicación y profesionalidad hacen que esto sea posible.
Sobre la fotografa
Avishag Shahar-Yashuv es una fotógrafa periodística y de documentales israelí. Sus obras reciben una amplia exposición en la prensa israelí y en el extranjero, así como en medios digitales, y algunas se han ganado de una condición icónica. Ganadora de “Testimonio Local”.
La elección de la fotografía candidata en el estudio no fue casual.
En el caos que domina la vida de estas mujeres, queríamos crear una sensación de control. Los elementos ambientales, como la iluminación natural o el contexto "bélico" a la que fueron forzadas, fueron quitados de la ecuación. El fondo neutro está también controlado y vacío, lo que deja a las mujeres fotografiadas en el limbo que caracteriza este periodo de sus vidas, pero también deja espacio para la interpretación del espectador.
Con una sensibilidad maravillosa, Avishag nos permitió vislumbrar a las propias mujeres, sus expresiones faciales, su lenguaje corporal, sus ojos, el hecho de que están expuestas y son vulnerables, pero también llenas de fuerza y compasión, y la emocionante conexión que se generó entre ellas y las mujeres de la Fundación para las Víctimas del Terrorismo.
The Jewish Agency for Israel




































